La abstracción es el arte espiritual de nuestro tiempo

En 1945 nace, en Dublín, Sean Scully, quién tan solo cuatro años después se trasladará a Londres. Con tan solo 15 años se incorpora como aprendiz en una imprenta, donde aprenderá a trabajar la luz y la sombra a través de la forma y la presión, y dos años más tarde empieza a formarse como artista en la Central School of Art. En 1965, mismo año en que nace su hijo Paul, decide centrarse en el arte formándose en la Croydon College of Art, algo que continuará en la Universidad de Newcastle. En los años posteriores recibirá diversas becas de los Estados Unidos, como la Frank Knox de la Universidad de Harvard, la beca Harkness o la beca Guggenheim, algo que motivará su traslado para vivir y trabajar desde allí.

Sus pinturas se inician con interés por la figuración, algo que abandona rápidamente al descubrir el expresionismo abstracto. A menudo utilizará tramas y cuadriculas, influenciado por el Op Art y el conocimiento del textil en Marruecos gracias al viaje que realizó en 1969. Sully plantea un universo de líneas horizontales y verticales que delimitan superficies de color, generando cadencias cromáticas que trascienden la obra como objeto físico adentrándose en el terreno de la espiritualidad. Pero el conocimiento del minimalismo simplificará sus trabajos, así como sus tonalidades. La década de los 80 empieza a alejarlo de su etapa anterior. Será esta abstracción geométrica la que permanecerá en su trabajo hasta la actualidad.

Destaca la relación que el artista mantiene con Barcelona, donde pasa largas temporadas, algo que le permite experimentar con técnicas como la pintura mural al fresco o los vitrales, gracias al proyecto de intervención que llevó a cabo en la iglesia románica de Santa Cecilia de Montserrat.

Su obra ha sido expuesta por todo el mundo, pero destaca su primera exposición indiviudal, en 1973, en la Rowan Gallery de Londres, donde se vendieron todas sus obras. Pero su recorrido expositivo pasa por el MoMA, la Fundació Joan Miró, el MACRO, el Museo de Arte CAFA o la Whitechapel Gallery. Encontramos obras de Scully en más de 150 museos y colecciones públicas.