Pintor y artista gráfico español que formó parte de la Nueva figuración madrileña a finales de la década de los 70. Se traslada a vivir a Madrid en 1964, fecha en la que comienza a pintar. Aquí se integra en el grupo de artistas que expone en la galería Buades de Madrid. Los diez años siguientes experimentará con los lenguajes de vanguardia del momento. Su trabajo inicial está también muy ligado al compromiso político propio del contexto artístico español de los setenta.

Su obra nace de la necesidad de reflexionar sobre la función social del arte. En su primer periodo destacamos una clara influencia del grupo artístico Equipo 57, pero posteriormente se sitúa entre el Pop Art y la pintura neoexpresionista. Su obra se caracteriza por un colorido vivo, cargado de una alegría festiva y una pincelada vibrante. Encontramos en Quejido una reacción frente al carácter más oscuro del informalismo. Muestra en sus producciones una actitud irónica y provocadora.

La Colección Suñol Soler guarda en su reserva 2 pinturas del artista: El beso (1980) y El pozo (1980). Esta última fue prestada por la Fundació Suñol al Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) para la exposición de 2022- 2023 ‘Distancia sin medida’, que rinde homenaje a la trayectoria del artista. También se mostró su obra en exposiciones colectivas de la fundación: ‘Coloquios’ y ‘Los esquizos de Madrid: Figuración madrileña de los ‘70’ (en colaboración con el MNCARS) de 2009 y  ‘5è Aniversari. 27 obres, 18 autors’ (2011-2012).