La pintura ya no es la finalidad en sí, sino que es tan solo uno de los instrumentos para hacer visible todo aquello que aún es desconocido al hombre y por el hombre.

Achille Perilli nace en Roma en 1927, y con tan solo 14 años ya se encuentra en el taller de Aldo Baldinelli, asistiéndole en dibujos y pinturas acompañado de Dorazio. Más adelante, en 1945, estudia Bellas Artes además de literatura contemporánea. Y es en ese mismo año que junto a otros artistas funda el Grupo Arte Sociale, tan solo un año después realizan su primera exposición conjunta. Pero un importante punto de inflexión llega en 1947, cuando firma el manifiesto Forma 1 acompañado de otros creadores, dando paso a la creación de un grupo de vanguardia de inspiración marxista y de rechazo al arte realista-figurativo. Las obras de este primer periodo se caracterizan por un uso racionalizado del espacio y las formas, cercano a las tendencias de la abstracción geométrica. La suma de líneas y planos, así como colores de grandes contrastes, constituyen diversas arquitecturas en su obra.

A partir de este momento su trayectoria se desarrolla a través de la pintura, aunque también trabajará en la escritura de artículos y teoría; y en teatro, mediante escenografías y diseño de vestuarios. El compromiso del artista con la investigación lo lleva a investigar nuevas soluciones formales, como los graffiti, realizados a partir de 1958, y donde introduce materiales como la piedra pómez, el polvo de mármol, la tiza o el acetato de vinilo, adentrándose en el terreno del informalismo, rompiendo así con la geometrización del espacio que lo caracterizaba en sus primeras obras.

Además viaja habitualmente por Europa descubriendo la obra de otros artistas, destacando su visita a España (1953), París (1956) o Varsovia y Cracovia (1969). Por lo que a pintura se refiere, expondrá con cierta frecuencia por toda Italia, pero también en ciudades de gran importancia como Nueva York, Ámsterdam, Praga, Moscú o Düsseldorf, tanto a título individual como colectivo.